En las primeras etapas neolíticas del Próximo
Oriente no se implantan todas las características definitorias del neolítico.
Por ejemplo, aún no encontramos cerámica, por lo que se ha hablado
tradicionalmente del neolítico Precerámico, que en el Próximo Oriente se divide
en dos etapas: el PPNA (neolítico precerámico A, siguiendo la nomenclatura en
inglés: Pre-pottery Neolithic) y el PPNB.
PPNA: Tiene una cronología comprendida entre
9.500-8.500 BC (10.000-9.400 BP). Este tecnocomplejo está localizado en el
denominado “Corredor Levantino”.
Fue identificado por primera vez en el yacimiento de Tell-el-Sultan de Jericó
(Israel). Otros yacimientos pertenecientes a este tecnocomplejo son Khiam ,
Netiv Hagdud o Nahal Oren en Israel, Aswad, Mureybet, Qamarel Cheikh Hassan en
Siria o Cayönü en Turquía.
Los poblados del PPNA son muy variables en sus
dimensiones, desde 2-3 hectáreas hasta los 100m2 de los menores.
Dado que los yacimientos son mayores que en etapas precedentes (Natufiense o
Khiamiense) se considera que la población es mayor en la región en estos
momentos.
Las viviendas son estructuras circulares u ovales, similares a las
del Natufiense. Su disposición está condicionada por las
características topográficas del poblado, más que por una intención de
estructurarlo.
reconstrucción de viviendas del tipo A y B |
PPNB: Comprende entre 8.500-6.700 a.C.
(9.500-7.900 BP). Esta etapa supone el afianzamiento de la producción de alimentos
y su expansión a otras áreas adyacentes como Anatolia, Chipre y la Meseta
iraní.
La domesticación de nuevas especies y la aparición del pastoreo nómada
acompañan al proceso de expansión. Prácticamente se abandona la caza,
centrándose en la ganadería.
La mayoría de los asentamientos comprende entre las dos y las doce hectáreas (entre las 1000 y 2000 personas),
y corresponden a ocupaciones anteriores del lugar.
Destacan Tell es-Sultan de
Jericó, ´Ain Ghazal en Israel, El Kown, Bouqras y Tell Abu Hureyra en Siria,
Cayönü Tepesi, Haçilar y Catalhöyük en Turquía y Maghzaliyah o Nemrik en Irak.
Las estructuras de uso doméstico son,
generalmente, de plana rectangular o cuadrada. Algunas con dos plantas, la inferior
usada como almacén y la superior como vivienda.
Existen construcciones
empleadas con fines rituales o sociales. Aparecen nichos con objetos en ambos
tipos de construcciones.
Se practica el comercio tanto a larga distancia como a
nivel local.
El comercio de cobre nativo va siendo habitual en estos momentos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario